En Radio Uniajc, le hemos dado la bienvenida a nuestra cuarta invitada en “Historias de la COP”. Esta vez, la oportunidad fue para la Fundación Impulso Verde y su representante Lina Castaño, en compañía del profesor de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas, Mauricio Nieto. Esta fundación tiene una misión importante: proteger la biodiversidad y fomentar la sostenibilidad en Colombia.
La Fundación, desde sus inicios en 2016, ha trabajado incansablemente en la recuperación del bosque andino en los departamentos del Valle del Cauca y Nariño, colaborando con comunidades locales para lograr un impacto duradero. Este año, Impulso Verde tendrá una destacada participación en la COP16.
La Fundación Impulso Verde ha basado su labor en un enfoque colaborativo, uniendo esfuerzos con comunidades campesinas e indígenas en las zonas de intervención. Lina explica que su trabajo no solo se dedica a la plantación de árboles, sino que también incluye programas de educación ambiental y el impulso de negocios verdes.
“En Nariño, por ejemplo, hemos trabajado de la mano de comunidades indígenas para la construcción y gestión de viveros, donde producimos especies nativas que se estaban perdiendo en la región, especialmente en el sector de Ipiales”, menciona Lina.
A través de estos viveros, la fundación ha logrado recuperar especies de plantas autóctonas, cuyo hábitat se había visto afectado por actividades como la ganadería y la tala indiscriminada. Esta estrategia también busca preservar la biodiversidad, uno de los pilares de la COP16 y de nuestra Institución.
Otro de los programas destacados es la creación de huertas comunitarias, conocidas como “chagras”, gestionadas por las comunidades indígenas. Estas huertas permiten practicar técnicas tradicionales de cultivo que garantizan la seguridad alimentaria de las familias locales, promoviendo la diversidad agrícola frente a los monocultivos.
Uno de los desafíos más importantes para ellos ha sido encontrar el equilibrio entre la conservación del medio ambiente y el bienestar de las comunidades locales. En regiones como el Cauca, donde los monocultivos y la ganadería han desplazado métodos agrícolas tradicionales, la fundación ha promovido la diversificación de cultivos a través de estas huertas.
La fundación también ha implementado programas educativos para las nuevas generaciones, enseñando sobre la importancia de cuidar el medio ambiente. A través del proyecto “Mis Amigos los Árboles”, se enseña a niños de diferentes comunidades sobre la relevancia de la reforestación mediante talleres interactivos. Los pequeños dibujan y crean árboles a partir de sus propios diseños, que luego se convierten en un bosque virtual. Pero el impacto va más allá de lo digital, ya que, por cada dibujo subido a la plataforma, se planta un árbol real en las zonas de trabajo de la fundación.
Con esta reflexión, se invita a la comunidad Unicamacho a participar conscientemente en las actividades de la COP16 y a cuidar los entornos naturales que tenemos en la Institución.
Aquí puedes escuchar el podcast:
Yuli Andrea Hurtado
Oficina de Comunicaciones
Unicamacho