Así se vivió la jornada de grados con la cual la Institución Universitaria Antonio José Camacho culminó el primer semestre académico del 2025 -1, en donde más de 600 graduandos siguieron alimentando sueños para hacerlos realidad en estos 55 años de historia para la institución.  

Este viernes 20 de junio, el Aula Máxima de la sede sur fue el escenario para que los sueños tomaran forma, el esfuerzo se transformara en títulos, y el orgullo de los graduandos se viviera en su máxima expresión. En una emotiva jornada, los estudiantes de las Facultades de Educación a Distancia y Virtual e Ingenierías, cerraron una jornada de tres días de graduación que quedará grabada en la memoria de todos los asistentes a estas jornadas.

En este último día desde el ingreso de los graduados, los aplausos no se hicieron esperar. Las emociones flotaban en el ambiente: nervios, risas, lágrimas contenidas y abrazos que hablaban más que mil palabras. Mientras sonaban los himnos de Colombia, Cali y UniCamacho, el auditorio se llenaba de solemnidad y orgullo.

Durante cada una de las ceremonias se contó con la presencia de invitados de honor, quienes compartieron inspiradores mensajes para los nuevos profesionales. Uno de ellos, emprendedor y representante de Lincet Comercial S.A.S., relató cómo su empresa nació en un garaje, con el conocimiento como único capital. Invitó a los graduados a soñar en grande, actuar con decisión y recordar que el éxito nace primero en la mente y luego en la realidad: “Hay una fuerza más poderosa que la energía eléctrica o una bomba atómica, y es la fuerza de voluntad”, expresó.

También enfatizó en que sí se puede ser profeta en la propia tierra si se actúa con calidad, pasión y persistencia.

El día de hoy, fue tan emotivo como los dos anteriores, donde la entrega de diplomas estuvo llena de sentimientos: se escucharon sollozos de felicidad, se vieron abrazos largos, ojos brillosos y risas nerviosas. En medio de esos momentos, las menciones de honor y distinciones resaltaron el compromiso y la excelencia de algunos graduados, quienes recibieron su reconocimiento entre lágrimas de emoción.

El discurso del rector, Hugo Alberto Gonzáles López, fue uno de los más esperados de la ceremonia. Con sinceridad y afecto dijo: “Me encantan los grados, porque para esto existen las universidades”.

Afirmó que los graduados no le deben nada a nadie, porque todo lo han conseguido con su propio esfuerzo y dedicación, aunque también hizo un llamado a la humildad, recordando que este logro fue acompañado por un equipo: docentes, familias, amigos y la institución. Para reforzar este mensaje, se proyectó un fragmento de una película, generando una conexión especial con el público.

Finalmente, uno de los graduados tomó la palabra en representación de sus compañeros. Agradeció a sus familias, amigos y docentes, y expresó con emoción: “Hoy no solo celebramos nuestros logros individuales, sino nuestro arduo trabajo colectivo”.

Esta jornada en la cual hizo parte la facultad de Ciencias empresariales y la Facultad de ciencias sociales y humanas, no solo marcó el cierre de un ciclo académico, también fue una celebración del legado de UniCamacho en sus 55 años de historia, siendo una institución que transforma vidas y aporta al desarrollo de la región y del país.

Desde el primer paso al aula hasta el último abrazo de despedida, la jornada de grados de estos tres días consecutivos, fueron el reflejo de una fiesta de emociones, logros y nuevos comienzos. A quienes se graduaron hoy, les decimos:

¡Gracias por dejarnos ser parte de su historia y por conformar nuestra familia Unicamacho, la universidad que todos queremos!